La producción agrícola y ganadera son fundamentales para nuestra supervivencia, pero su impacto en los ecosistemas ha sido devastador. La agricultura intensiva y la ganadería de alta densidad han alterado los ecosistemas y dañado la salud del planeta de maneras que son cada vez más evidentes. Sin embargo, hay una esperanza en la producción regenerativa, una práctica que busca restaurar y revitalizar los ecosistemas afectados.
El Impacto de la Agricultura Intensiva
La agricultura intensiva, caracterizada por el monocultivo, el uso excesivo de agroquímicos y la pérdida de biodiversidad, ha dejado una marca indeleble en nuestras vidas y la del planeta[1]. Estas prácticas afectan la estructura del suelo y contaminan los recursos hídricos con pesticidas y nutrientes sintéticos, lo que tiene consecuencias devastadoras para la biodiversidad y la salud humana, que cada año intoxica a más de un millón de personas por el uso de pesticidas[2].
La exposición a pesticidas ha llevado a enfermedades graves en las poblaciones rurales, y la contaminación de cuerpos de agua ha sido vinculada a enfermedades como el cáncer[3]. Además, la agricultura intensiva contribuye significativamente a las emisiones de gases de efecto invernadero, exacerbando el cambio climático.
Los Desafíos de la Ganadería Intensiva
La ganadería, vital para la producción de carne y lácteos, también ha contribuido al deterioro de nuestros ecosistemas. Ocupa el 30% de la superficie terrestre y es una fuente importante de contaminación del suelo y del agua[4].
La expansión de la ganadería ha llevado a la deforestación, la contaminación del suelo y la emisión de gases de efecto invernadero que contribuyen al cambio climático.
Actualmente, la ganadería es responsable del 18% de las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero. Además, la demanda de tierras para pastos y forrajes ha llevado a la pérdida de hábitats naturales[5].
La Alternativa: agricultura y producción regenerativa en ganadería
La agricultura y ganadería regenerativa emergen como soluciones reales para mitigar estos impactos del consumo humano, pues se centran en restaurar y revitalizar los ecosistemas en lugar de degradarlos[6].
La producción agricola regenerativa incluye enfoques como la agricultura orgánica y la permacultura, que promueven la sostenibilidad, la diversidad de cultivos y la conservación del suelo. Estas prácticas reducen la dependencia de productos químicos y contribuyen a nuestro bienestar[7].
Por otro lado, la producción ganadera regenerativa prioriza la salud del suelo a través de la rotación frecuente del ganado y períodos de descanso vegetal. Esto contribuye a la captura de carbono y a la vida biodiversa. Además, beneficia a las comunidades rurales al gestionar de manera efectiva el tiempo y la calidad de vida [8].
Para que estas dos actividades se consideren de producción regenerativa deben cumplir con las siguientes características:
- Autosuficiencia se refiere a la colaboración dentro de una comunidad, la creación de redes que compartan recursos, habilidades y necesidades, y promover un comercio local basado en la ecología en lugar de la economía tradicional [9].
- Perspectiva holística considerando a la naturaleza como un sistema integrado en el que los humanos también forman parte[10].
- Regeneración del suelo mediante prácticas como dejar de labrar la tierra, evitar la erosión del suelo, fomentar la diversidad de plantas y utilizar métodos como la asociación y rotación de cultivos y ganado[11].
Nuestro Compromiso con un Futuro Sostenible
En Consuma Conciencia trabajamos con proyectos comprometidos con la agricultura y la ganadería regenerativa. Estas alternativas de nuestra comunidad productora lo hacen posible:
- Cooperativa Flor y Piedra: Implementan la técnica de chinampas de azotea para cultivar alimentos en pequeños espacios urbanos.
- Berries Factory: Cultivan berries de manera agroecológica, sin pesticidas ni productos químicos, promoviendo prácticas sostenibles.
- Flores de Vida: Se dedican al cultivo de plantas aromáticas, árboles frutales y rescatan la milpa.
- El Buen Campo: Siembran en chinampas agroecológicas en Xochimilco, aplicando técnicas prehispánicas y prácticas ecológicas, utilizando biofiltros para purificar el agua de los canales.
- Frutos Rojos: Cultivan fresas, frambuesas, blueberries, zarzamoras y uchuvas de manera orgánica y agroecológica.
- Huevos camperos: Crían gallinas de libre pastoreo
- La Privera: Cultivan mangos sin agroquímicos ni pesticidas en huertas familiares.
- Mui Chuni: Producen pollo orgánico de libre pastoreo, sin hormonas ni antibióticos.
- Paraíso Vegetal – Mujeres Cosechando: Desde Temoaya, rescatan alimentos y técnicas locales tradicionales de producción con abonos orgánicos, naturales y amigables con el ambiente.
- Rancho Agroecológico El Acuario: Cultivan y capacitan a personas más jóvenes de las comunidades en prácticas agroecológicas y permacultura.
- Rancho Santa Teresita: Crían ganado de manera regenerativa y agroforestal.
- Santa Pradera: Implementan un método holístico y regenerativo de pastoreo y producen carne natural y saludable.
Estos proyectos productivos son solo algunos ejemplos de cómo la agricultura y la ganadería regenerativa pueden marcar la diferencia. Al apoyarles estamos dando pasos efectivos hacia un futuro más sostenible y saludable para nuestro planeta y nuestra sociedad.
En comunidad, podemos regenerar nuestros ecosistemas y asegurar un futuro mejor para todas las personas.
Referencias
[1] Landeros-Sánchez, C., Moreno-Seceña, J., Nikolskii, I., & Bakhlaeva-Egorova, O. (2011). Impacto de la agricultura sobre la biodiversidad. CONABIO. (pp. 477-491).
[2] Sarandón, S. J. (2002). La agricultura como actividad transformadora del ambiente. El impacto de la agricultura intensiva de la Revolución Verde. Agroecología: El camino hacia una agricultura sustentable, 23-47.
[3] Martinez, R. (2018). Los peligros de los fertilizantes químicos. Bio Eco Actual. https://www.bioecoactual.com/2018/02/21/los-peligros-los-fertilizantes-quimicos/
[4] United Nations Environment Programme. (2023). The Journey of Food: Entry Points & Opportunities for a Food System Transformation. https://wedocs.unep.org/handle/20.500.11822/43006
[5] Ferrer, G. J., Pinto, L. S., Luna, E. P., Vera, J. C. K., Burgos, A. A., López, G. V. y Gamboa, A. A. (2015). Ganadería y cambio climático: avances y retos de la mitigación y la adaptación en la frontera sur de México. Sociedades rurales, Producción y Medio ambiente, 15, (30), 51-70. https://sociedadesruralesojs.xoc.uam.mx/index.php/srpma/arti-cle/view/289/287
[6] Quintero-Castaño, Y. A. (2021). La agricultura regenerativa como una alternativa para la conservación de los suelos degradados a causa del sistema agroindustrial en Colombia. Tesis de Especialización. Universidad de Antioquia
[7] Ibarra Vrska I. P. (2019). Agricultura regenerativa y el problema de la sustentabilidad. Aportes para una discusión textual, (74), 51-85. https://doi.org/10.5154/r.textual.2019.74.02
[8] Serrano-Zulueta, R., Manzano, P., & del Prado, A. (2022). El impulso y desarrollo de la ganadería regenerativa como herramienta para la sostenibilidad agroalimentaria. (PB 2022-01 ed.) Basque Centre for Climate Change. https://www.bc3research.org/index.php?option=com_pbriefings&task=downpubli&iddoc=62&Itemid=292&lang=en_EN
[9] Ibarra Vrska I. P. (2019). Agricultura regenerativa y el problema de la sustentabilidad. Aportes para una discusión textual, (74), 51-85. https://doi.org/10.5154/r.textual.2019.74.02
