Ecofeminismo, salud sexual y emprendimientos sustentables de y para mujeres.
Estamos convencidas del rol clave que tenemos las mujeres en la producción y el consumo sustentable, y junto con nuestra comunidad abordamos los retos y posibilidades de construir propuestas cotidianas más amables, equitativas y sororas.
Las mujeres somos quienes tomamos las decisiones de compra en el hogar, lideramos emprendimientos que cubren nuestras necesidades de consumo cotidiano y nuestras prácticas de cuidado pueden hacer realidad entornos más saludables, ecológicos y de comercio justo.
Sin embargo, la industria del consumo sigue usando nuestros cuerpos, temores y aspiraciones como mercancía, sorteamos más obstáculos como emprendedoras y seguimos enfrentando barreras en la toma de decisiones de nuestros presupuestos y en el acceso a financiamiento para nuestros proyectos.

Ecofeminismo y consumo
El ecofeminismo nos invita a reflexionar sobre la urgencia de valorar una cultura del cuidado, basada en valores como la reciprocidad, la cooperación y la complementariedad, para hacer realidad una sociedad más sostenible y equitativa.
Esta propuesta cuestiona las visiones dualistas y jerárquicas que fundamentan la violencia contra las mujeres y la explotación de la humanidad sobre la naturaleza, como vía para transformar un modelo de desarrollo que aún depende de la depredación de la naturaleza y del trabajo no remunerado de las mujeres.[1]
El ecofeminismo nos muestra que la desvalorización de las tareas reproductivas, el extractivismo y la degradación ambiental están interconectados. Tanto mujeres como naturaleza son consideradas materia prima disponible para ser consumidas sin mayor consideración.
Estos paralelismos nos invitan a considerar el impacto que tienen nuestras prácticas cotidianas de consumo: la elección de lo que comemos y usamos todos los días, a quién se lo compramos, cómo nos relacionamos con quienes producen, con los territorios donde se producen…
En este contexto, cuidarnos a nosotras mismas y a nuestro entorno definitivamente es un acto político.
El ecofeminismo nos recuerda que somos distintas pero interdependientes, y que juntas podemos hacer realidad una sociedad más sostenible y equitativa, donde el cuidado del medio ambiente y de las personas sea el centro de nuestras decisiones.[2]

Consumo y sexualidad de las mujeres
La sexualidad femenina ha sido objeto de cambio de la publicidad, sexualizando a las mujeres e instaurando modelos únicos de belleza que nos hacen competir entre nosotras, y socavan nuestra autonomía para tomar decisiones sobre nuestro propio cuerpo y sexualidad.[3]
La industria diseña productos para nosotras, pero no necesariamente pensando en nosotras, pues nos insta a encajar en patrones de juventud, delgadez, satisfacción del otro (generalmente masculino) y desinterés por nuestro propio placer… Productos que impactan en nuestra salud, en el planeta, en la reproducción de las barreras que enfrentamos generación tras generación…
En este sentido, consumir de manera crítica también implica preguntarnos para qué compramos lo que compramos… No solo quién y dónde se produjo, sino con qué fin y atendiendo a qué intereses…
Porque nuestras decisiones de consumo pueden reforzar estereotipos, menoscabar nuestra salud emocional, sexual y afectiva; pero también pueden acercarnos a relaciones más sororas y amables con nosotras mismas y con las mujeres que nos rodean.

Por eso: Nos Tocamos
Sobre sexualidad de las mujeres, consumo crítico y autonomía, conversamos con Tere García Hubard, quien junto con sus hermanas, Gabriela y Paulina conducen el podcast sobre sexualidad de las mujeres: Nos Tocamos… Con las manitas.[4]
Las tres hermanas dedicaron su primera temporada al Clítoris, con un contenido super documentado y espectacularmente presentado, abordado multidisciplinarmente, pero también desde la experiencia personal, con perspectiva feminista, empoderadora, crítica y consciente.
Teresa es parte de nuestra comunidad. Es de las primeras mujeres que nos recibió en su casa, eligiendo productos saludables, ecológicos y de comercio justo de los proyectos productivos con los que trabajamos, y ha sido un “placer” reconocernos en el proyecto que tiene con sus hermana, porque como ella asegura:
…Una mujer más satisfecha, que accede a su propio placer sexual, va a estar más empoderada, tendrá mayor capacidad de exigencia y de pedir lo que necesita. Con sus decisiones cotidianas podrá compensar la exclusión de las mujeres del sistema económico, cuestionar “necesidades impuestas”, generar mayores sinergias y espacios para construir alternativas…

Las mujeres somos clave en la producción y el consumo sustentable.[5]
Como consumidoras tenemos un gran poder para ejercer nuestras decisiones de consumo de manera consciente y sorora. Al elegir productos sustentables, estamos apoyando a emprendimientos liderados por mujeres y contribuyendo a la construcción de un mundo más equitativo.
– Las mujeres ejercemos el 70% de las decisiones de compra de consumo cotidiano en las familias.
– Pero solo el 33% de las mujeres toman decisiones financieras por su propia cuenta, en comparación con el 48% de los hombres en América Latina.
– En México, las emprendedoras representan el 27% de la población ocupada.
– El principal motor que tenemos para emprender ha sido lograr la autonomía económica, que como sabemos, es clave para tener autonomía en muchos de los ámbitos de nuestras vidas.
– Solo el 2.3% del capital se destina a proyectos liderados por mujeres.
Estas barreras también reducen el acceso a bienes económicos como la tierra, la toma de decisiones sobre ella, y a mayor probabilidad de acceder a empleos. Además el peso de las tareas domésticas que sigue recayendo en las mujeres deja poco tiempo para ejercer plena autonomía y oportunidades económicas.[6]
El consumo consciente implica tomar decisiones informadas sobre lo que compramos, también nos da el control sobre nuestras acciones para mejorar nuestro bienestar y reducir nuestra huella ecológica.
Desde cuestionar el uso de tampones y toallas sanitarias,[7] que pueden tener un impacto negativo a nuestra salud[8] y en el medio ambiente,[9] hasta elegir alternativas sustentables en los productos que consumimos todos los días.
En un mundo donde cada vez es más importante cuidar el planeta y nuestro cuerpo, nuestra comunidad de productoras ofrece una oportunidad para quienes buscamos hacer la diferencia.

Productos sustentables de mujeres para mujeres
ConSuma Conciencia es un proyecto fundado por mujeres, integrado por una mayoría de iniciativas lideradas por mujeres, y por muchísimas más mujeres que semana a semana nos abren las puertas de sus casas para recibir las maravillas de nuestra comunidad productora.
– Somos el 80% del equipo que trabaja cada semana para sostener esta plataforma que nos une.
– 60% de los proyectos de ConSuma Conciencia son liderados por mujeres, con productos de: herbolaria, cuidado personal, limpieza, artesanía, textiles, alimentos y bebidas.
– Y también son mujeres más del 70% de quienes eligen nuestros productos conscientes, para cuidarse, cuidar a sus familias y a todas las personas y territorios que se involucran en su producción.
Cada producto de nuestra comunidad tiene una historia detrás, una historia de dedicación y conexión con nuestro planeta, mira algunos de nuestros proyectos liderados por mujeres:
- Agape es el proyecto liderado por Yolo, ella elabora alimentos artesanalmente con productos locales y de temporada. En su tienda puedes encontrar, salsa, botanas y mermeladas.
- Amantecarte Plumario liderado por Alice, nos trae aretes de plumas libres de crueldad, con un gran trabajo artístico y artesanal.
- Amarana es el proyecto de Ana quien nos ofrece deliciosos snacks como galletas, granolas, panquecitos y barritas, elaborados con ingredientes de origen vegetal, sin aditivos químicos y conservadores.
- Armonica Herbolaria es el proyecto liderado por Renata, a partir de mezclas de tinturas madre y remedios herbolarios con plantas endémicas mexicanas.
- Aye Aya liderado por Laura (cofundadora de ConSuma Conciencia) ofrece planes para mejorar el bienestar físico, energético, mental, emocional y espiritual, productos naturales y seguros.
- Azul Verde liderado por Clara y Alexa, nos trae productos de limpieza y cuidado personal, biodegradables, artesanales y naturales. Además, cuenta con la certificación participativa del Mercado El 100, que garantiza que todos los productos son orgánicos.
- Baby Cavy es liderado por Natalia, quien ofrece cubitos de comida para tu bebé. Son caseros, saludables y nutritivos. Hechos con ingredientes orgánicos y aprobados por nutriólogas en alimentación infantil y pediatras.
- Bris es fundadora de BSANUS, Un proyecto de snacks saludables sin azúcar añadida ni procesamientos ultrarrápidos, con ingredientes 100% naturales y respaldados por nutriólogos e ingenieros en alimentación.
- Care Atelier es liderado por Mariel, ofrece productos de cuidado personal, elaborados artesanalmente donde combina la tradición herbolaria con la aromaterapia.
- Coatlicue Cacao es el proyecto liderado por Talía, de chocolate artesanal con cacao fermentado de Chiapas y miel de la sierra Norte de Puebla.
- Corazón de Volcán es un proyecto de diseño creado por Lucía, que busca conectar con el corazón de las personas a través de objetos llenos de buena energía. Las piezas son realizadas en colaboración con talentosas mujeres bordadoras maya, combinando conocimientos ancestrales con diseños frescos y únicos.
- María Cresencia se dedica a elaborar artesanías de deshilados, desde Temoaya. Una técnica que forma parte del arte popular mexicano, con un conocimiento que se ha venido transmitiendo de generación en generación.
- Dalir confecciona prendas cómodas y aireadas con cortes sencillos y versátiles, donde busca integrar la armonía de diferentes textiles y colores.
- Däki natural, el proyecto liderado por Silvia, nos brinda productos de higiene y cuidado personal elaborados artesanalmente con sus productos estrictamente cuidados. Puedes encontrar exfoliantes, mascarillas y jabones.
- Flores de Vida es una empresa familiar de Amecameca, liderada por Sara, con un huerto de cultivo de plantas aromáticas, árboles, frutales y rescate de la milpa. Puedes encontrar tés, aceites esenciales y otros productos como tamales y galletas de pinole.
- Gosthi es un proyecto de la comunidad ñhañhu en Ixmiquilpan, Hidalgo, liderado por Belém. Elaboran cepillos con fibra natural de ixtle.
- Hoja Suelta, liderado por Lorena, es un proyecto sostenible y comunitario que reúne a pequeñas/os productoras/es, amistades y abuelas en torno a un huerto, cocina y taller artesanal.
- KOCHOTL es el proyecto de Concepción, produce mermelada de Chagalapoli en la región tropical de México. Sus ganancias son destinadas al proyecto de Reintroducción de la Guacamaya Roja.
- Las Espirituosas es el proyecto liderado por Ingrid. Una distribuidora de bebidas artesanales mexicanas, con insumos de nuestras tierras y creatividad en su elaboración. Ella nos ofrece whiskeys, rones, ginebras, sirope de quina y pox.
- Maya Ch’ ol es el proyecto liderado por Isabela, ella brinda prendas contemporáneas que fusionan arte indígena con lo moderno, para un uso casual, hogar o trabajo.
- Mi Alimento Sagrado es el proyecto de Nailea, ella nos ofrece Probióticos vivos creados a partir de la fermentación de la leche y el agua con piloncillo, con los mejores ingredientes orgánicos y sostenibles.
- Origen Campestre lo lidera Laura. Ofrece botanas y snacks horneados saludables, producidos artesanalmente sin químicos ni conservadores.
- Paraíso Vegetal: Mujeres Cosechando, es el proyecto de Belén y su familia, dedicada a la agricultura orgánica y agroecológica de vegetales y hortalizas locales, tortillas y otros alimentos con maíces nativos y técnicas tradicionales.
- Paulina Stephan es una emprendedora culinaria mexicana con residencia temporal en Chiapas. Dueña de un café en CDMX donde vende café de alta calidad y productos como miel, jaleas, salsas y cacao puro.
- Rancho Agroecológico: El Acuario es liderado por Norma y es un proyecto familiar en Guerrero dedicado a la agroecología y la soberanía alimentaria, cosechando frutas y hortalizas saludables mediante técnicas limpias y sin transgénicos. Capacitan a jóvenes en producción agroecológica y practican sistemas de permacultura y redes de comercialización solidarias.
- Sabio Orgánicos es liderado por Oli, ella nos ofrece carne de cerdo orgánica. En su tienda puedes encontrar caldo de huesos, chorizo, chilorio, chuleta, cochinita, entre otros productos.
- La artista visual Talia Romo Xochitlotzin crea obras de arte únicas en pintura, grabado, fotografía y artes visuales, que exploran temas como la cultura ancestral Mexicana, la figura femenina y la espiritualidad, combinados con elementos de pintura abstracta. Puedes disfrutar y adquirir fácilmente sus creaciones.
- Victoria es la fundadora de Tanuki. Ella ofrece productos y servicios para la salud de tu piel y el medio ambiente como un solo sistema complejo que determina las necesidades de tu piel. Su enfoque innovador busca ofrecerte una solución personalizada para mejorar la salud de tu piel de manera sustentable.
- Maga por medio de su proyecto, Vexa ofrece una variedad de productos saludables, inspirados en la fusión de sabores mediterráneos y elaborados con ingredientes locales y empaques amigables con el medio ambiente. Cuenta con pestos, salsas, ghee, especias, panes keto y harinas sin gluten.
Gracias por ser parte!
REFERENCIAS
[1]Mercado Social de Madrid, (2017). Ecofeminismo. Por Marta Monasterio. https://www.youtube.com/watch?v=1UdMQdejr_M
[2] Cortés, (2021). Agroecología y ecofeminismos: Alternativas frente al agroindustria en el contexto de colapso bioclimático. http://132.248.9.195/ptd2021/junio/0813097/Index.html
[3] Fragmento entrevista Ma. Teresa Garcia Hubard (2023).
[4] Síganlas en las redes y exploren toda la bibliografía que han compartido en su web: @nos_tocamos | www.nostocamos.com | https://open.spotify.com/show/258DTmZ4IUY73DN0zakdsF?si=03c06476b1c245d8
[5] https://www.hbs.edu/ris/Publication%20Files/Brooks%20Huang%20Kearney%20Murray_59b551a9-8218-4b84-be15-eaff58009767.pdf
https://imco.org.mx/la-brecha-de-genero-limita-a-las-emprendedoras/
https://imco.org.mx/la-brecha-de-genero-limita-a-las-emprendedoras/
[6] ONU Mujeres, (s.f.). Empoderamiento económico. https://www.unwomen.org/es/what-we-do/economic-empowerment
[7] Una persona menstruante genera 60 kilogramos de residuos de este artículo durante su vida, eso equivale a 100.000 toneladas de desechos al año. UNEP (2018). Toallas sanitarias para frenar la contaminación. https://www.unep.org/es/noticias-y-reportajes/reportajes/toallas-sanitarias-para-frenar-la-contaminacion#:~:text=En%20promedio%2C%20las%20mujeres%20que,toneladas%20de%20desechos%20al%20a%C3%B1o.
[8] Contienen químicos tóxicos como dioxinas y pesticidas, con graves consecuencias, como cáncer, daño reproductivo y alteraciones endocrinas. Womens Voices (2016). El problema con las toallas femeninas. https://womensvoices.org/wp-content/uploads/2016/08/feminine_wipes_factsheet_spanish_final-1.pdf
[9] Además, las toallas sanitarias tardan entre 500 y 800 años en degradarse y una vez que se utilizan terminan en cuerpos de agua o vertederos. ASECA, (2022). ¿Sabes cuanto tardan en degradarse los residuos? https://aseca.com/cuanto-tardan-en-degradarse-los-residuos/#:~:text=Toallas%20sanitarias%20y%20tampones%3A,entre%20500%20a%20800%20a%C3%B1os.